Manuscritos de Herta es un material de lectura de Estación Espacial Herta.
Partes[]
- Prefacio: se encuentra en la zona de la base.
- Círculo de Genios: se encuentra en la zona de almacenamiento.
- Sociedad del Conocimiento: se encuentra en la zona de almacenamiento.
- Corporación para la Paz Interastral: se encuentra en la zona de mando principal.
Transcripción[]
Prefacio[]
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Aquel día, la académica Cleo, de los Candelógrafos, me preguntó: "¿Le gustaría escribir algo para el universo, señora?". Dije que no, pero ella respondió solemnemente: "Escriba algo, por favor. Es una solicitud de la Corporación".
Para ser sincera, nunca antes se me había ocurrido. En el Círculo de Genios tenemos nuestras propias reglas y rara vez compartimos nada con el mundo exterior. De hecho, ¿qué nos importa lo que pase en el universo? Nuestras investigaciones y nuestros descubrimientos nos hacen felices, con eso es suficiente. Con nuestras habilidades, incluso si todo el cosmos estuviera en guerra, podríamos sobrevivir por nuestra cuenta. Pero luego pensé, si escribiera un libro, ¿qué daño haría? No se me ocurrió ninguno. De hecho, no soy la única que ha pensado en publicar algo en la historia del Círculo de Genios. El miembro n.º 1, Zandar, escribió un libro. Aiden, el n.º 22 e inventor de la fórmula de nueve palabras, también escribió uno. Hasta donde yo sé, el miembro n.º 76, Tornillum, también escribió hace varias Eras Ámbar una guía para enseñar a su mayordomo cómo realizar el mantenimiento de un enorme sistema de administración de computadoras. Además, la gran Nous, la Erudición, guarda toda la información en su cuerpo, ¿no es eso una forma de escritura? Después de reflexionar sobre todo esto, creo que no estaría mal que yo escribiera mi propio libro.
La semana pasada, la Corporación para la Paz Interastral envió a alguien con el pago inicial por el libro y la cantidad de ceros me sorprendió mucho, así que empecé a pensarme seriamente esto de escribir. En primer lugar, quiero explicar el contenido de este libro en este prefacio: no va a incluir ninguno de mis descubrimientos revolucionarios ni tampoco contendrá deducciones matemáticas intrínsecas. Aunque eso es por lo que soy famosa, quiero mostrar mi verdadero yo. La verdad es que quiero escribir un libro sobre el universo, los Eones, las distintas facciones y todo lo demás. En la última Era del Ámbar he tenido contactos más frecuentes con otros mundos: comencé a trabajar con la Corporación, ayudé a Xianzhou a luchar contra las abominaciones, me hice con muchas colecciones del Expreso Astral y tuve algunas peleas con el Jardín de los Recuerdos. Desde luego, he tenido más experiencias que en el pasado. Descubrí que lo realmente interesante en el universo no son sus frías leyes y normas, sino los Eones formados de filosofía altamente condensada y los estúpidos seres humanos que los rodean. Eso es de lo que voy a escribir: unos dioses solitarios y sus ciegos creyentes. Espero que sea del agrado de los lectores.
Quiero agradecer a la Corporación para la Paz Interastral por su patrocinio.
El Círculo de Genios[]
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Invito a los lectores a reflexionar sobre una pregunta: ¿cuál es la organización más misteriosa de todo el universo?
¿Son los famosos Cazadores de Estelaron, quienes se atreven a oponerse a la Corporación? ¿Es el misterioso y desconocido Dispositivo IX? ¿Son los Anónimos que fallecieron junto a Akivili, o el Coro del Firmamento que solo existe en las leyendas? Ninguno de los anteriores. La verdad es que la organización más misteriosa, trascendental y desconocida de todo el universo es a la que pertenece esta autora: el Círculo de Genios, favorecido por el Eón Nous.
En primer lugar, expongamos un axioma: incluso en la escala cósmica, la autora es una supergenio de la clase que solo aparece una vez cada varios milenios. Hemos de aclarar que no es que la autora no tenga vergüenza, sino que la vergüenza no significa nada para ella. La autora resolvió el problema de la teoría de ondas solitarias y la hipótesis del modelo Spark cuando era niña. En su adolescencia, la autora descubrió el método de transformación de los bariones sigma. Cuando era de mediana edad, propuso la secuencia de Herta y publicó un artículo sobre la reversión de la vejez; después rejuveneció de verdad en la vejez. Cuando la autora volvió a ser joven, una vez más resolvió el misterio del fenómeno del desbordamiento Imaginario y capturó y selló el Estelaron que vino de más allá del cielo. La autora salvó al planeta en el que vivía de la destrucción un total de diecinueve veces y estuvo dos veces en la presencia de los Eones. Todo lo anterior no es más que una pequeña parte de los numerosos logros de la autora. Solo una persona tan única como la autora puede recibir una invitación para unirse al Círculo de Genios y, desde el nacimiento de Nous, solo ha habido 84 ilustres miembros. Por eso afirmo que, basándonos en la evidencia de la que disponemos, el Círculo de Genios es la organización más misteriosa. En este libro, y por primera vez, los lectores podrán asomarse tras el enigmático velo que cubre al Círculo de Genios.
(El borrador llega a un final abrupto aquí. A continuación hay garabateadas algunas frases:
Las personas de este club de porquería no se comunican entre sí en absoluto, ¿qué voy a escribir?
Una letra desconocida dice abajo:
Querida, tienes que escribir algo. Los lectores están esperando.
La caligrafía familiar de Herta responde:
Si es tan fácil, ¿por qué no lo escribes tú?)
La Sociedad del Conocimiento[]
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El universo es vasto e ilimitado y la Erudición lo abarca todo. Los genios tienen una manera genial de vivir, y una persona mediocre se satisface con su mediocridad. Además del talentoso Círculo de Genios, que conoció personalmente a Nous, también existe una organización movida por la Erudición como fuente de poder que estudia e investiga sin descanso. Se hacen llamar a sí mismos la Sociedad del Conocimiento.
Dejando a un lado las preferencias personales, los esfuerzos de la Sociedad del Conocimiento son de alguna manera respetables. El club de Nous está lleno de excéntricos, lunáticos, solitarios, genios asociales y personas con discapacidades sociales. Incluso si siguen haciendo descubrimientos asombrosos, nunca dejan que el mundo exterior los conozca, y mucho menos los publican (este libro es una excepción). La filosofía de la Sociedad del Conocimiento es comunicar y compartir: el conocimiento es una moneda valiosa, y la moneda solo puede hacer milagros cuando está en circulación. Por eso intercambian conocimientos y sabiduría, e intercambian fórmulas por recetas. La Corporación para la Paz Interastral los aceptó y patrocinó generosamente y les ha ofrecido el poder con el que cuenta la corporación, incluida la tecnología para trasladarse entre los mundos. Los miembros de la Sociedad viajan por muchos mundos, recopilando todos los conocimientos valiosos como mercadería.
La Sociedad del Conocimiento es más un grupo empresarial que un grupo investigador. La organización interna de la Sociedad toma a las escuelas como unidad organizativa básica y cada una es responsable de sus propias ganancias y pérdidas. De esta manera, los académicos investigan e intercambian el conocimiento que han adquirido en su área de investigación, con el objetivo de obtener tesoros de valor incalculable. Las siguientes son solo algunas de las escuelas más conocidas:
La escuela que más ha aportado al universo es la de Sinestesia. Durante mucho tiempo, la comunicación y el intercambio han sido un tema importante que ha preocupado a la Corporación para la Paz Interastral. La base de cualquier transacción es el contrato y un contrato requiere consenso, pero hay una larga lista de lenguajes hablados por las formas de vida inteligentes. Los investigadores de la Escuela de Sinestesia están comprometidos con la creación de un puente mental común entre las diferentes especies: la actualmente utilizada baliza sinestésica.
Gracias a las balizas sinestésicas, todas las señales que contengan un significado pueden convertirse en pulsos de pensamiento y traducirse a un lenguaje inteligible, ya sean movimientos corporales, destellos de luz, vibraciones de sonido o cambios en las moléculas de olor. Así superan la primera barrera de la comunicación. La Corporación para la Paz Interastral ha utilizado las balizas sinestésicas como la base para establecer una enorme base de datos, capaz de almacenar el vocabulario de casi cien millones de idiomas. Las palabras ya no son un misterio.
Se dice que la Corporación todavía le paga trimestralmente a la Escuela de Sinestesia una gran cantidad en concepto de tasas de patentes. Esta escuela posee la riqueza de toda una nación. Informantes confiables informaron a la autora que el próximo tema de investigación de la escuela será la tecnología de comunicación mediante teledetección de ultraalcance. Hace más de seiscientas Eras del Ámbar, Elías Salas, miembro n.° 56 del Círculo de Genios, inventó la tecnología y le dio uso en el Círculo. Pero, por supuesto, los genios animan a la gente ordinaria a seguir desarrollando sus propios conocimientos.
Esta escuela ve el universo como un gran sujeto de observación ecológica. Está obsesionada con el estudio de las criaturas cósmicas, como las ballenas cantantes del vacío y las medusas fluorescentes. La academia ganó reconocimiento por su descubrimiento del Muro del Cometa Celestial, que se confirmó como una antigua creación de Qlipoth, la Conservación. La Corporación estaba eufórica y donó una generosa suma de dinero a la escuela, verificando plenamente la eterna verdad científica de que es más eficaz ser inteligente que diligente.
Los Candelógrafos forman el departamento de imprenta de la Sociedad, integrado por un número innumerable de redactores, transcriptores, mecanógrafos, programadores y trabajadores que elaboran libros. La escuela, la cual se basa en los pilares de la virtud noble y el altruismo, abandonó la investigación científica egoísta y se dedicó a la noble causa de llevar el conocimiento a más personas. El conocimiento científico de la Sociedad del Conocimiento se organiza aquí en volúmenes que se publican y venden en varios mundos. El más famoso de ellos es la serie de libros llamada «Guía del espíritu viajero».
El Cuerpo de Arqueólogos Armados está interesado en la exploración y la arqueología interestelar. Siempre van a planetas desolados y exploran las ruinas más peligrosas. Imagínate un grupo de arqueólogos armados hasta los dientes liderando a una docena de mercenarios saltando de la nave de exploración, deslizándose por los huecos de los edificios antiguos y olvidados durante incontables Eras del Ámbar. En el camino, dejan atrás como sacrificio a algunos idiotas que accidentalmente accionaron alguna trampa. Cuando finalmente llegan a su destino, desentierran antigüedades y documentos valiosos. Luego, tranquilamente, colocan explosivos y lo destruyen todo para hacerse paso. Después abordan la nave espacial y se van volando... Hay quien dice que parecen más un grupo de mercenarios que de académicos, pero eso ya depende de la interpretación de cada uno.
Esta nueva escuela se reorganizó tras la quiebra de la Escuela Psicohistórica. Su propósito original era descubrir los factores de las perturbaciones ocultas y las leyes cambiantes de la historia, y así poder predecir el futuro. Pero ahora solo es un grupo de estafadores que usan complejos "algoritmos" para adivinar el destino. La razón de incluir esta escuela aquí es para rematar este interesante artículo con un buen chiste.
La Corporación para la Paz Interastral[]
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Qlipoth, el Señor del Ámbar, una estatua colosal sin cabeza, callado e ignorante de los asuntos del mundo, que solamente se preocupa por forjar su misterioso y gigantesco muro. ¿Para qué? Nadie lo sabe. ¿Contra qué? Se desconoce. Pero nosotros, la gente normal, lo dejamos atrás después de darnos cuenta de nuestra ignorancia. Sin embargo, en el mundo siempre hay gente fuera de lo normal. Dentro de este grupo, hay dos clases de personas. Una de ellas piensa: "Guau, un dios está construyendo un muro, eso significa que los muros son sagrados. ¡Nosotros también tenemos que construir muros!". ¿Qué clase de lógica sin sentido es esta? Y así, este grupo de personas simplemente pensó que habían sido testigos de algún tipo de revelación y comenzaron a desperdiciar preciados recursos materiales en sus respectivos planetas para construir cosas inútiles. A esta gente se les llama Arquitectos. Por otro lado, hay otro tipo de personas aún más estúpidas que los Arquitectos. Aunque a los Arquitectos les falta algún que otro tornillo, al menos piensan en cosas que les beneficiaban. Pero este otro grupo de personas piensa: "Guau, un dios está construyendo un muro, eso significa que construir muros es sagrado. ¡Vamos a ayudar a ese dios a construir su muro!". ¿Pero qué...?
Y entonces, en el universo, un grupo de seres humanos con espíritu de sacrificio se unió para formar el equipo de apoyo de Qlipoth. Al ser conscientes de que este equipo no tenía ninguna habilidad, usaron el poder divino de la Vía para viajar a varios mundos y así conseguir todo tipo de materiales necesarios para construir un muro que dedicar al dios. En ese preciso momento, dos personas inteligentes salieron de aquel grupo de idiotas y cambiaron el destino de todo el universo.
A continuación, la autora describirá en detalle lo que sucedió.
Primero, el equipo de apoyo voló a un planeta desconocido. Tuvieron mucha suerte de dar con un planeta habitado por razas amigables que les brindaron una cálida bienvenida. El equipo de apoyo dijo: "¡Queridos compatriotas! El universo está en juego en este momento. Nuestro Eón está forjando años luz de muros para proteger el cosmos, ¡y rogamos encarecidamente que se unan a la causa!".
Los extraterrestres, con una sonrisa, respondieron: "Guau, eso es increíble. ¿Qué podemos hacer para ayudar?".
El equipo de apoyo dijo: "Necesitamos madera, piedra, acero, cemento, aleación de titanio... En resumen, queremos todos los materiales que sirvan para construir".
Los extraterrestres dijeron: "Está bien, disponemos de esos materiales en abundancia. ¿Qué ofrecen a cambio?".
En ese momento, nació el primer hito de la economía: el intercambio de recursos.
El equipo de apoyo dijo: "Oh, tenemos mucha madera, piedra, acero, cemento, aleación de titanio... En resumen, todo lo que se puede usar para la construcción, lo tenemos".
Los extraterrestres dijeron: "Tal intercambio no tendría sentido".
Y aquí es donde los inteligentes hacen su puesta en escena. Hoy, sus nombres están grabados en todas las paredes y techos de la sede de la Corporación para la Paz Interastral: Louis Fleming y Dongfang Qixing. Ellos respondieron rápidamente: "A tres galaxias de aquí hay un planeta llamado Clementina. Tienen un producto especial llamado fruta del sol de invierno que es sumamente delicioso". La vendieron como si fuera una fruta que caía del cielo.
Los extraterrestres respondieron: "Guau, eso suena increíble. Está bien, quinientos kilogramos de madera por quinientos kilogramos de fruta del sol de invierno".
En este momento, los recursos ganaron un valor cuantificable.
La fruta era muy valiosa. El inteligente n.° 1, Louis Fleming, dijo: "¡Ni en una Era del Ámbar se podrían producir quinientos kilogramos! Pero quinientos kilogramos de madera no es nada para ustedes, así que cambiemos quinientos kilogramos de madera por cinco kilogramos de fruta del sol de invierno. ¡Les garantizo que les encantará!".
Estimados lectores, esta conversación tuvo lugar hace casi ochocientas Eras del Ámbar. Seguro que ahora sabrían reconocer a simple vista que el inteligente n.° 1 era un farsante. La fruta del sol de invierno podía ser deliciosa, pero de ninguna manera era rara. El hombre inteligente mintió porque poseía un activo importante: asimetría de la información. Si una parte tiene más información que la otra, gana la iniciativa. Aplicado a este caso, lo que tenía el inteligente n.° 1 no era otra cosa que el poder de fijación de precios.
Como resultado, las cosas comenzaron a desarrollarse en una dirección positiva: el equipo se dio cuenta de que, para obtener suministros, tenían que proporcionar bienes en los que la otra parte estuviera interesada. De esta forma, el equipo de apoyo ya no solo compró materiales de construcción, sino que empezaron a adquirir comida, bebida, ropa, bienes cotidianos... todo por lo que otros planetas estarían interesados. Su negocio se desarrolló y crecía día tras día. El inteligente n.° 2, Dongfang Qixing, se dio cuenta de que, dado que eran los únicos en el universo que hacían negocios, era hora de establecer sus propias reglas.
De esta manera nació la divisa interestelar.
Hace más de setecientas Eras del Ámbar, Louis Fleming y Dongfang Qixing anunciaron que reorganizarían el equipo de apoyo y crearían la Corporación para la Paz Interastral. Al mismo tiempo, la Corporación para la Paz Interastral lanzó una moneda universal: los créditos. Desde entonces, la gente de cada planeta ya no tenía que preocuparse de por cuánto podían intercambiar sus productos. ¡Todo tenía un precio! Obtuvieron créditos de la Corporación y utilizaron los créditos para comprar bienes de la Corporación. En lugar de pasar por un mercado triangular mediado por la Corporación, las transacciones se liquidaban directamente con ella. Puede parecer que la situación había cambiado poco para los compradores y vendedores, pero para la Corporación suponía una gran ventaja.
El flujo de activos tanto del lado del comprador como del vendedor se detuvo.
Y esta pausa significa la aparición de depósitos de activos.
Activos valorados en billones estaban ocultos en forma de créditos de la Corporación y así llenaron rápidamente sus bolsillos. ¡Pero sus bolsillos eran un pozo sin fondo! De esta manera, la Corporación pasó de ser una pequeña organización que compraba suministros para un Eón, a la principal potencia de todo el universo.
Cabe mencionar que, aun con tan gran éxito, la Corporación no ha olvidado su propósito original. Los materiales de construcción acumulados por la Corporación durante casi 800 Eras del Ámbar se han apilado en todos los planetas que hay alrededor de Eón Qlipoth, y la cantidad sigue aumentando. Pero el Eón nunca ha dicho nada al respecto y nunca ha usado esos suministros. Incluso así, la actitud de la Corporación al respecto no ha cambiado.
Eso es lo que conocemos como fe.
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- Versión 1.0
- Manuscritos de Herta se añadió al juego.